Las ventas minoristas de las pequeñas y medianas empresas (pymes) en Argentina cayeron un 1,7% en noviembre, en comparación con el mismo mes del año pasado, a precios constantes. Así lo indicó el último informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), basado en un relevamiento a 1.300 comercios de todo el país. Aunque el panorama general muestra una tendencia negativa, algunos sectores lograron mantenerse estables o incluso registrar aumentos gracias a las promociones y a la estabilidad de precios en ciertos rubros. En los primeros once meses del año, las ventas acumulan un descenso del 12,2%, lo que refleja el impacto continuo de la inflación y la pérdida de poder adquisitivo en el consumo.

No obstante, la comparación mensual ajustada por estacionalidad arrojó un dato más alentador: un crecimiento del 3,9% con respecto a octubre. Este aumento estuvo impulsado por estrategias comerciales, como las promociones que implementaron muchos negocios para contrarrestar los aumentos de precios impuestos por algunos proveedores. Esto permitió una mayor estabilidad en sectores como alimentos y bebidas, aunque otros rubros continúan sufriendo las consecuencias de la caída en la demanda.

Análisis por sector

El informe de CAME detalla que en noviembre, cinco de los siete sectores analizados experimentaron caídas interanuales. La mayor retracción fue en perfumería, con una baja del 15,4%. Las farmacias también sufrieron una contracción importante, del 10,4%, mientras que el rubro bazar, decoración y textiles para el hogar registró una caída del 9,4%.

Por otro lado, dos sectores lograron repuntar. El rubro de alimentos y bebidas, uno de los más dinámicos del comercio pyme, experimentó un crecimiento del 4,4% interanual. Sin embargo, este aumento no es suficiente para compensar la caída acumulada del 14,5% en lo que va del año. El alza en noviembre se debió en parte a las promociones, pero la preocupación sigue latente entre los comerciantes por los incrementos en los precios de productos clave, como la carne, que afectaron la última semana del mes y podrían impactar negativamente en las ventas de diciembre, especialmente en las fiestas de fin de año. Además, el crecimiento del comercio informal es otro factor que preocupa al sector, ya que se ha observado un incremento en la actividad de ventas no registradas.

El sector de calzado y marroquinería también registró un avance del 2,6% en noviembre. Sin embargo, la caída acumulada en el año sigue siendo del 7,2%. Las promociones fueron clave para dinamizar las ventas de productos más accesibles, aunque en las ciudades de frontera la situación fue distinta: muchos consumidores optaron por comprar en países vecinos, especialmente en Chile, donde los precios son percibidos como más competitivos.

Sectores en caída

El rubro de farmacias sufrió una baja del 10,4% en noviembre, a precios constantes, y acumula una caída del 22,1% en los primeros once meses del año. La demanda se redujo principalmente en productos no esenciales, como suplementos dietéticos y productos de cuidado personal. En tanto, las ventas de perfumería descendieron un 15,4% interanual. La tendencia de los consumidores a priorizar productos básicos afectó la venta de artículos de lujo, como perfumes y cosméticos de alta gama. Además, el auge del comercio electrónico, que ofrece descuentos más atractivos, desvió gran parte del consumo hacia las plataformas online.

El sector de bazar, decoración, textiles para el hogar y muebles tuvo una caída del 9,4% en noviembre. Pese a esto, algunos comercios vieron un leve repunte mensual gracias a las promociones y la oferta de productos importados a precios competitivos. No obstante, el rubro de muebles continúa mostrando ventas muy por debajo de lo esperado.

Desafíos y expectativas

Más allá de las diferencias entre sectores, el principal desafío señalado por los comerciantes sigue siendo la carga impositiva, mencionada por el 66% de los encuestados. A esto se suman los problemas de demanda interna, los altos costos de producción y las dificultades para acceder al crédito. Estos factores complican la estabilidad financiera de las pymes, que han tenido que adaptarse ajustando su estructura de costos y buscando nuevas formas de mantenerse competitivas.

En cuanto a las expectativas para diciembre, los comercios esperan que las ventas mejoren, aunque los aumentos de precios y la competencia de los comercios informales seguirán siendo obstáculos a superar. Las promociones seguirán siendo una herramienta clave para atraer a los consumidores en un contexto donde el poder adquisitivo está deteriorado.