El precio de la nafta en las provincias ha vuelto a posicionarse por encima del registrado en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), marcando un incremento significativo en los costos para quienes residen lejos del área metropolitana. Un informe privado reciente revela que el litro de combustible en el interior cuesta en promedio un 7,5% más que en CABA, situación que había mostrado una leve tendencia a reducirse, pero que en febrero volvió a los niveles de meses anteriores.

El reporte, realizado por la cooperativa Colsecor, recopiló información en 27 localidades de siete provincias, analizando el comportamiento de los precios entre el 1 y el 7 de febrero. En dicho período, el litro de nafta en el interior alcanzó los $1.237, mientras que en CABA se ubicó en $1.151. Esto implica que, aunque los precios subieron tanto en la capital como en el interior, la diferencia se amplió nuevamente.

En términos de variación mensual, el precio de la nafta en las localidades del interior se incrementó un 3,9%, en tanto que en la capital el aumento fue del 2%. Según el economista Gerardo Sánchez, la suba del precio promedio en el interior durante febrero fue prácticamente el doble que en CABA. Este diferencial, que había comenzado a reducirse en los meses anteriores, regresó a niveles observados cuatro meses atrás.

A pesar de las expectativas de convergencia en los precios entre el área metropolitana y el interior, factores como la logística, la competencia y las condiciones estructurales mantienen la brecha. Esto afecta directamente a las economías de las pequeñas y medianas localidades, que deben enfrentar costos más altos para acceder a bienes y servicios esenciales como los combustibles.

El análisis del reporte no se limita únicamente a la nafta, sino que también abarca el comportamiento del gasoil, un insumo clave para el transporte y la actividad económica en el interior. En las localidades evaluadas, el precio del litro de gasoil se ubicó en $1.287, lo que representa un 10% más que en CABA, donde el valor es de $1.170.

En cuanto a la variación mensual, el incremento en CABA fue del 2,4%, frente al 2% registrado en el interior. No obstante, a nivel interanual, el interior acumuló un aumento del 33,8% en el precio del gasoil, mientras que en la capital la suba fue mucho mayor, alcanzando el 49,2%. Aunque la brecha entre ambas regiones no es tan amplia en términos de gasoil, los precios siguen siendo un desafío para el interior.

El estudio de Colsecor pone en evidencia los desafíos estructurales que enfrentan las pequeñas y medianas ciudades del interior del país. El costo del transporte de bienes y servicios está directamente influenciado por el precio de los combustibles, lo que repercute en la inflación general y en la competitividad de estas economías regionales.

La carga impositiva, la disponibilidad de abastecimiento y las políticas de precios a nivel nacional son factores clave que seguirán influyendo en la evolución de los costos del combustible en los próximos meses. Para las localidades alejadas de las grandes ciudades, este contexto implica un mayor esfuerzo para sostener sus actividades económicas.

En cuanto al análisis a largo plazo, el reporte destaca que, aunque los precios del combustible en el interior son consistentemente más altos en términos absolutos, la brecha con CABA había mostrado una tendencia a la baja en el último año. Durante el periodo interanual comprendido entre febrero de 2024 y febrero de 2025, el precio del litro de nafta en el interior subió un 40,2%, mientras que en CABA el aumento fue del 54,7%. A pesar de esto, en el último mes la tendencia se revirtió y la diferencia volvió a ampliarse.

El seguimiento de estos comportamientos en el mercado de combustibles resulta fundamental para entender el contexto económico a nivel nacional. La fluctuación de los precios no solo afecta al bolsillo de los consumidores, sino que también tiene un impacto significativo en las cadenas de producción y distribución de bienes en todo el país.