Desde el lunes y hasta el 6 de junio, empresas tecnológicas vinculadas al agro de Córdoba participan de la Misión Agtech USA 2025, una iniciativa que las lleva al centro del cinturón agrícola de Estados Unidos: Indianápolis y St. Louis. El objetivo es claro: conocer desarrollos innovadores, explorar modelos de negocio escalables y generar vínculos estratégicos que puedan ser aplicados al sector agroalimentario cordobés.
La comitiva está integrada por startups del Clúster Agtech Córdoba, funcionarios provinciales, universidades y representantes del sector agropecuario. La organización está a cargo de la Agencia Córdoba Innovar y Emprender, con el respaldo de ProCórdoba, el Ministerio de Bioagroindustria y el mismo Clúster Agtech.
La misión busca facilitar el acceso a desarrollos tecnológicos aplicables al agro y fomentar el intercambio de conocimientos con centros de innovación norteamericanos. La agenda incluye visitas a empresas, instituciones de investigación y encuentros con inversores y proveedores, tanto estadounidenses como argentinos radicados allí.
El ministro de Bioagroindustria de Córdoba, Sergio Busso, explicó que se trata de una misión exploratoria que apunta a identificar innovaciones aplicables a la producción agropecuaria, agroalimentaria y de bioenergía. La intención es que el conocimiento adquirido pueda trasladarse de manera práctica al territorio cordobés.
Uno de los principales focos está puesto en detectar tecnologías y buenas prácticas que puedan adaptarse a la realidad local, pero también en abrir mercados y establecer alianzas comerciales. En ese sentido, se busca que las firmas cordobesas no solo tomen ideas, sino que también puedan ofrecer sus productos y servicios en el exterior.
Manuel Ron, presidente de la Agencia Córdoba Innovar y Emprender, destacó el potencial que tienen estas empresas para competir en un contexto global. Según sus palabras, esta misión no es un hecho aislado, sino parte de un proceso para integrar a Córdoba en los circuitos internacionales de innovación y producción agroindustrial.
La delegación representa una combinación de instituciones académicas, entidades productivas y pymes con fuerte perfil tecnológico. Participan la Universidad Nacional de Córdoba, la Universidad Nacional de Río Cuarto y la Universidad Católica de Córdoba, además de organizaciones como Federación Agraria Argentina, CARTEZ, CONINAGRO, Sociedad Rural Argentina y ACABIO. El grupo incluye también referentes y productores que forman parte activa del entramado agroindustrial de la provincia.
A lo largo de la estadía, las empresas cordobesas tendrán la posibilidad de analizar experiencias de gestión, evaluar soluciones tecnológicas para el agro, e incluso diseñar acuerdos de colaboración bilateral. Otro punto fuerte de la misión es el acceso a inversores con interés en proyectos que integren desarrollo, producción sostenible y escalabilidad global.
La iniciativa busca dejar capacidad instalada y generar un retorno concreto en el corto y mediano plazo. Cada empresa participa con el compromiso de trasladar los aprendizajes al ecosistema productivo local, aportando a la consolidación de un modelo agroalimentario con base tecnológica.
Aunque el viaje se da en una coyuntura económica compleja para Argentina, los organizadores sostienen que este tipo de acciones permiten mantener activa la proyección internacional de las pymes y startups cordobesas, en especial aquellas con propuestas innovadoras que ya han demostrado impacto en la región.
El cronograma en Estados Unidos se completa con rondas de negocios, charlas con expertos en innovación aplicada al agro y presentaciones institucionales. También están previstas reuniones con organismos que pueden convertirse en aliados técnicos o financieros para los proyectos cordobeses.
Los integrantes de la misión coinciden en que este tipo de actividades consolidan vínculos entre el sector público, privado y académico. Y remarcan que ese trabajo conjunto es clave para que Córdoba avance en la construcción de un perfil exportador, no solo de materias primas sino también de conocimiento, soluciones digitales y servicios especializados para el agro.
Al cierre de la misión, las entidades organizadoras prevén compartir un balance y una hoja de ruta con las oportunidades detectadas y los contactos generados. La expectativa es que, a partir de este intercambio, surjan proyectos conjuntos que puedan ejecutarse en el corto plazo, sumando valor a la cadena agroalimentaria de Córdoba.