En el marco del Mes de la Mujer, el Museo Provincial del Deporte inauguró una muestra que celebra el papel de las mujeres cordobesas en el deporte. Desde el martes 18 hasta el domingo 23 de marzo, quienes visiten el estadio Mario Alberto Kempes podrán recorrer una exposición cargada de historia, esfuerzo y logros inolvidables.

La iniciativa reúne objetos que marcaron hitos para el deporte femenino a nivel nacional e internacional. Entre las piezas exhibidas, se encuentra la camiseta de las Leonas que utilizó Soledad García en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, el uniforme de Yamila Nizetich en Río 2016, y la medalla de bronce que ganó Georgina Bardach en Atenas 2004. También forman parte de la muestra elementos de Las Murciélagas, la selección argentina femenina de fútbol para ciegos.

La propuesta apunta a poner en valor el esfuerzo y la pasión de estas atletas, quienes a lo largo de sus carreras se convirtieron en referentes de distintas generaciones. “A través de sus logros, todas han inspirado a nuevas generaciones y han demostrado que el deporte es un espacio de perseverancia y superación”, señaló Georgina Bardach, vocal del directorio de la Agencia Córdoba Deportes.

La muestra no solo visibiliza trayectorias individuales, sino también una historia colectiva: la del crecimiento del deporte femenino en Córdoba. Muchas de las protagonistas han cedido sus objetos personales al museo como parte de un legado que busca proyectarse en el tiempo.

El coordinador del museo, Gustavo Farías, destacó el proceso de evolución que ha atravesado el deporte practicado por mujeres. “Si bien la rama femenina tuvo una marcada evolución en las últimas tres décadas, la presencia de la mujer en el deporte ha sido constante y de permanente superación”, afirmó.

La exposición se puede visitar en los horarios habituales del museo: de 10 a 13 y de 14 a 18. No se necesita reserva previa, y quienes asistan también podrán realizar el recorrido completo del estadio, que incluye visitas al vestuario, al campo de juego y al Palco VIP.

Este homenaje colectivo es una oportunidad para conectar con historias de vida que superan las marcas o los trofeos. Cada objeto exhibido tiene detrás una historia de esfuerzo, de entrenamientos, de viajes, de derrotas y victorias, y sobre todo, de convicción. Porque cada una de esas mujeres, en su disciplina, construyó caminos que hoy siguen otras.

Con esta muestra, el Museo del Deporte refuerza su compromiso con la memoria y la representación de quienes transforman el deporte desde dentro, abriendo nuevas posibilidades para niñas y jóvenes de toda la provincia. Y en este mes especial, la mirada se posa en ellas, protagonistas silenciosas durante mucho tiempo, que hoy tienen un espacio propio para que su voz y su historia sigan inspirando.