Economía

12/09/2024
Inflación de agosto: el 4,2% que supera expectativas y marca resistencia
El Índice de Precios al Consumidor (IPC) de agosto, publicado por el INDEC, registró un aumento del 4,2%. Este valor refleja una tendencia persistente en la inflación, que acumula un 236,7% interanual.
Compartí en tu redes:

El ministro de Economía, Luis Caputo, había reconocido previamente que la inflación "no cede al ritmo esperado", y los datos de agosto confirman su evaluación. Si bien el aumento es solo ligeramente superior al 4% registrado en julio, los números reflejan una dinámica que sigue siendo difícil de controlar. Desde el Banco Central, Vladimir Werning había proyectado que septiembre podría cerrar con un 3,5%, pero la resistencia de los precios pone en duda esa expectativa.

Factores determinantes

Uno de los rubros más influyentes en el índice general de agosto fue el de alimentos y bebidas, que aumentó un 3,6%. Este sector tiene un peso importante en la estructura del IPC y, según distintos análisis privados, sigue siendo un motor clave de la inflación. Consultoras como EcoGO y Orlando Ferreres & Asociados señalaron aumentos del 3,8% en este rubro, mostrando la persistencia del alza en productos de consumo masivo.

En línea con esto, factores externos como el precio de las materias primas y las condiciones climáticas que afectan las cosechas también han ejercido presión sobre los costos de producción, dificultando una baja más rápida. A pesar de que algunos sectores muestran cierta desaceleración, como los precios regulados, la evolución general de los precios sigue siendo una preocupación para los actores económicos.

Además de alimentos, otros sectores mostraron incrementos significativos. Vivienda y servicios, por ejemplo, registraron una suba del 7%, impulsada por los ajustes en alquileres y tarifas públicas. A este grupo le siguieron Educación, con un 6,6% de aumento, y Transporte, que tuvo un incremento del 5,1%. Estos sectores, aunque no tienen el mismo peso que alimentos en el índice general, contribuyen a que la desaceleración de la inflación no avance con la rapidez esperada.

La política monetaria y fiscal

Desde el gobierno, la estrategia de "emisión cero" y la reducción progresiva del impuesto PAIS en 10 puntos porcentuales fueron señaladas como medidas clave para avanzar hacia una estabilización de los precios. Según el ministro Caputo, la meta es lograr una convergencia inflacionaria que permita, eventualmente, la eliminación definitiva de las restricciones cambiarias. Sin embargo, hasta el momento, los efectos de estas políticas no han sido suficientes para revertir la tendencia inflacionaria de manera contundente.

Las expectativas de inflación se mantienen altas, y las consultoras privadas advierten que la confianza en una baja significativa todavía es limitada. Este escenario crea incertidumbre en los mercados, donde muchas empresas ajustan preventivamente sus precios ante la inestabilidad cambiaria y fiscal.

En este contexto, la resistencia a la baja de ciertos sectores, especialmente aquellos con precios regulados, es vista como uno de los factores que frenan una desaceleración más profunda. Aunque ha habido ajustes menores en los últimos meses, estos precios continúan siendo una suerte de "ancla" inflacionaria, impidiendo que el índice general caiga a los niveles esperados por el gobierno.

Proyecciones para el cierre de 2024

El proyecto de Presupuesto 2024, que será enviado al Congreso en los próximos meses, anticipa que el IPC anual cerrará el año con una variación cercana al 130%. Si bien las autoridades económicas confían en que este objetivo es alcanzable, dependerá en gran parte de la efectividad de las políticas monetarias y fiscales aplicadas en lo que resta del año. Entre ellas, la eliminación del impuesto PAIS en diciembre es vista como un paso clave para aliviar la presión inflacionaria, con efectos que podrían sentirse con mayor claridad en 2025.

A pesar de estas medidas, tanto el Banco Central como economistas privados son cautos en sus proyecciones. Las estimaciones más conservadoras sugieren que la inflación mensual podría mantenerse en torno al 3,5% o 4% en los próximos meses, lo que dejaría poco margen para un descenso abrupto de los precios. Sin embargo, el gobierno sigue apostando por una estabilización progresiva que permita cerrar el año en un escenario menos volátil.

Expectativas del mercado

En las últimas semanas, diferentes relevamientos privados han mostrado que la inflación no ha logrado ceder de manera significativa. Desde mayo, el índice general se ha mantenido en torno al 4%, y aunque hay señales de desaceleración, la resistencia de ciertos sectores dificulta un cambio rápido. En este sentido, los economistas advierten que el control de los precios sigue siendo uno de los mayores desafíos para el equipo económico.

Uno de los factores que influye en la dinámica inflacionaria es la incertidumbre sobre el tipo de cambio y las políticas fiscales. Las empresas, ante la falta de previsibilidad en estos frentes, suelen aplicar ajustes preventivos para cubrir posibles aumentos de costos futuros. Este comportamiento contribuye a mantener desancladas las expectativas inflacionarias, dificultando el logro de una baja sostenida en los precios.

En síntesis, aunque los datos de agosto confirman que la inflación se mantiene controlada dentro de ciertos márgenes, la resistencia de algunos sectores clave plantea desafíos importantes para las autoridades económicas. El gobierno sigue apostando por una estabilización en el mediano plazo, pero las proyecciones del mercado indican que la desaceleración será lenta y gradual, sin cambios drásticos en lo inmediato.

 

Contactos Revista Breves

Conectate a nuestras redes

Logo © 2024 - Revista Breves
Copyright © 2024 Revista Breves. Todos los derechos reservados.