Con una inversión cercana a los 280 millones de pesos, el nuevo Polo Científico Tecnológico de Río Cuarto ya está en funcionamiento. El edificio fue inaugurado por el gobernador Martín Llaryora y el intendente Guillermo De Rivas, quienes destacaron la importancia de esta obra para consolidar a la ciudad como un nodo de innovación en el sur provincial.
Ubicado en un punto estratégico de la capital alterna, el edificio tiene una superficie de 550 metros cuadrados distribuidos en dos plantas, con proyección a ampliarse hasta los 800. Cuenta con espacios de coworking, sala de capacitaciones, oficinas, reuniones y servidores, lo que permitirá el desarrollo de proyectos científicos, tecnológicos y productivos vinculados al ecosistema local.
Durante la inauguración, Llaryora remarcó que este tipo de obras no solo representan una apuesta al futuro sino también una señal de esperanza. “Inaugurar un lugar como este es darle una esperanza a la Argentina”, expresó. Y agregó que desde esta ciudad y su región surgen hoy emprendedores agtech de relevancia nacional, vinculados a la biotecnología y a la transformación productiva.
El mandatario provincial también hizo foco en la universidad pública, a la que consideró un pilar esencial del conocimiento. “Defender a la universidad, al campo, a la producción y al trabajo, es defender el futuro de nuestra gente”, sostuvo.
Desde la gestión municipal, De Rivas agradeció el trabajo conjunto entre el sector público y el privado, y señaló que el nuevo polo distingue e identifica a Río Cuarto como una ciudad en pleno crecimiento.
La infraestructura fue desarrollada con el aporte coordinado entre el Gobierno de la Provincia y el Municipio de Río Cuarto, y es el resultado de una visión compartida para construir una plataforma que potencie el ecosistema emprendedor, educativo y productivo de la ciudad.
El Polo Científico cuenta con una comisión directiva integrada por representantes de la Agencia Córdoba Innovar y Emprender, la Municipalidad, el Clúster Tecnológico local y la Universidad Nacional de Río Cuarto. Esta comisión funcionará como órgano de gobierno, con reuniones mensuales para definir estrategias y planes de trabajo.
Además de las instituciones fundantes, se han sumado entidades de todo el ecosistema local, como el Cluster Agtech, el Polo Audiovisual, la Mesa de Innovación y Software, la Cámara de Industriales Metalúrgicos, universidades privadas como la Blas Pascal, Siglo XXI, Universidad Católica de Córdoba y Universidad de Mendoza, junto a empresas de base tecnológica.
El presidente del Clúster Tecnológico de Río Cuarto, Conrado Berbe, celebró la articulación lograda y subrayó que el espacio está pensado como un punto de encuentro. “Todos tenemos que converger aquí para que esta revolución industrial no nos pase por encima”, afirmó.
Desde el Gobierno provincial también se valoró la voluntad de convergencia de distintos sectores sociales, políticos y económicos. Para Llaryora, “estos espacios son centrales para el crecimiento y el progreso. Uno puede pensar distinto, ser de lugares diferentes, pero este lugar debe ser un espacio de unión”.
El Polo no sólo apuesta al desarrollo académico o técnico, sino también a la creación de nuevas oportunidades laborales. Se espera que este entorno colabore activamente en la formación de jóvenes con capacidades para emprender, generar empleo y contribuir al desarrollo local desde una mirada moderna e integradora.
La inauguración marca un nuevo paso en la estrategia de posicionamiento de Río Cuarto como capital alterna y como polo de conocimiento en el interior del país. Las herramientas ya están disponibles; ahora el desafío será activar la cooperación entre todos los actores y sostener los procesos que nacen en este nuevo espacio.